Nueva Zelanda: la biotecnología sigue siendo un tema delicado
El USDA-FAS informa que cuando el gobierno laborista de la primera ministra Helen Clark asumió el cargo a fines de 1999, existía la preocupación de que sucumbiera a la presión de los grupos anti-transgénicos y prohibiera el posible desarrollo o uso de la biotecnología en el país. Si bien las acciones iniciales confirmaron esas preocupaciones (incluida la imposición de una moratoria voluntaria sobre las liberaciones de transgénicos), una investigación de la Comisión Real de un año permitió un debate público racional sobre el tema. El informe de la Comisión brindó el respaldo general que el gobierno necesitaba para avanzar, y el Proyecto de Ley de Nuevos Organismos y Otros Asuntos de 2003 puso fin a la moratoria de los transgénicos y estableció regulaciones para su introducción.
El Gobierno ha dejado claro que la promoción de la biotecnología es una parte clave del plan de Nueva Zelandia para pasar de una economía que depende de los productos básicos a una basada en productos de valor agregado e intensivos en conocimientos.
Actualmente, las plantas y animales transgénicos no se cultivan comercialmente en Nueva Zelanda. Sin embargo, se están llevando a cabo una serie de pruebas de investigación contenidas que involucran organismos GM y los productos alimenticios con contenido GM se ofrecen legalmente para la venta y el consumo.
Si bien muchos agricultores de Nueva Zelanda apoyan la comercialización de cultivos transgénicos en Nueva Zelanda, el sector está abordando el tema con cautela. Muchos participantes de la industria agrícola están preocupados por el impacto que podría tener la producción comercial de cultivos transgénicos en la imagen "limpia y verde" de Nueva Zelanda en los mercados internacionales.